colgante de azurita

La azurita vibra con hambre de verdad, justicia y coraje. Como resultado, hace desaparecer los miedos irracionales y nos pide que recuperemos el control de nuestras emociones negativas en lugar de dejar que ellas nos controlen. La azurita nos ayuda a comprender la raíz de nuestro miedo, ira, tristeza y otras emociones incómodas. En particular, la azurita nos pide que consideremos la idea de que quizás nuestras emociones se basan en creencias del pasado, que podrían ya no ser ciertas, ¡o quizás nunca lo fueron! Una vez que hemos descubierto una comprensión más profunda de nuestras propias emociones, la azurita nos desafía a tomar las medidas adecuadas para responder a las situaciones complejas de la vida de una manera más madura y amable. La azurita es una piedra fantástica con la que trabajar cuando las personas tienen dificultades para ser honestas entre sí y quieren tener una relación más sana y feliz. Cuando se encierra en una matriz de granito, fomenta la diplomacia y el tratamiento inmediato de las situaciones negativas, antes de que tengan la oportunidad de hacerse más grandes.

La azurita es una piedra que celebra el pensamiento crítico al más alto nivel. Es una piedra maravillosa para los científicos de todas las disciplinas, ya que su energía se alinea con los principios del método científico y la búsqueda de la verdad. La azurita aumenta nuestro hambre de experiencias personales y la necesidad de realizar nuestra propia investigación diligente, en lugar de confiar en la información y las opiniones de los demás. La azurita nos anima a ser más conscientes de nosotros mismos y de nuestro impacto en los demás, y a cultivar el autoconocimiento. Estimula la creatividad y fomenta el aprendizaje permanente. Cuando se encierra en una matriz de granito, equilibra el escepticismo saludable con la necesidad de mantener una mente abierta.